Perpetuidad

Que Dios nos conceda la gracias
de hacer de nuestro amor un hijo
Quiero tener en mis manos
el fruto de tu vientre
y fruto mío,
para que nuestras vidas
se llenes de alegría
para enseñarle lo que hemos aprendido
para enseñarlo a amar
a amar a Dios sobre todas las cosas
y al prójimo a sí mismo
para amar a su padre y a su madre
para enseñarle
que gracias a él
nos sentimos más amantes
y más amigos
que nos damos el uno por el otro
y que el otro es bien correspondido
para enseñarle que ha sido
de gran dicha el haberlo conocido
porque algún día será grande
y como nosotros buscará otros caminos
pero que nos quede ese gran éxito
de haber enseñado a amar a nuestro hijo
¿Y cómo lograrlo?
Jamás vivir en discordia
y por siempre ser los mismos.


Victor Hugo -  1992